Ver la TV contribuye a la obesidad
Si tu objetivo en la vida es batir un record de obesidady tienes la costumbre de sentarte ante el televisor durante las comidas, y además sueles picotear mientras ves tus programas favoritos, vas por buen camino.
Pero si lo que quieres es mantenerte en tu peso ideal o perder algunos kilos que te sobran, entonces es mejor que te deshagas del televisor.
Supongo que te estarás preguntando que si quiero decir que ver la televisión engorda.
No es ver la televisión lo que engorda, sino verla mientras comes, porque eso hace que ingieras los alimentos de manera distraída y no te des cuenta de las señales que te envía el cuerpo cuando ya está saciado; además te hace masticar menos de lo necesario, lo cual también contribuye a la obesidad.
Y si tienes por costumbre comer chucherías, o frutos secos, o cualquier otra cosa mientras ves una película estás introduciendo en tu cuerpo una enorme cantidad de calorías sin darte cuenta. (Me imagino que conoces esa sensación de empacho que se nota cuando te levantas del sofá después de una película “amenizada” con algunos alimentos de los poco recomendables).
¿Te parece muy radical lo de suprimir el televisor? Entonces consérvalo, pero puede que te venga bien tener en cuenta los siguientes consejos:
Algunos consejos para no engordar viendo la televisión
- Apaga el televisor mientras haces tus comidas diarias. De paso disfrutarás más de lo que te llevas a la boca y hasta puede, si comes acompañado, que te comuniques un poco más con las personas que están a tu lado.
- Evita tener en casa esos productos tan tentadores como son las galletas, bombones y otras cosas apetitosas que todos conocemos.
- Siéntate ante el televisor con la barriga llena. Comprueba que no TE quedan restos de hambre o de sed.
- Si se te ocurre la idea de levantarte a comer algo mientras estás viendo una película procura concentrarte en lo que estás viendo y espera a que la tentación se desvanezca: igual que aparece la tentación, desaparece.
- Si la tentación de comer es irresistible come mientras siguen emitiendo el programa que estás viendo y, además, come fuera de la habitación en donde está la televisión encendida. No aproveches la publicidad para dejarte arrastrar por la tentación. Más bien aprovecha esas pausas publicitarias para hacer cosas útiles de la casa: recoger, preparar la ropa del día siguiente, etc.
Mi experiencia. ¿Y la tuya?
Me gustaría mucho conocer tu experiencia con este asunto de comer y beber mientras ves la televisión.
¿Qué es lo que más te tienta en esos momentos?
A mí, unas chucherías de regaliz. Si me despisto, me como un paquete entero. Procuro no tenerlas en casa.
Lo mejor de lo mejor según mi propia experiencia: salir a pasear después de cenar (lo digo porque a mí es por la noche cuando más tentaciones me dan de lanzarme de cabeza a por las chucherías).
Y por último, cada vez que consigas vencer la tentación de comer mientras ves la televisión, felicítate y concédete algún premio: ¡Te lo has merecido!
Creo que te puede interesar este otro artículo relacionado con la comida: